miércoles, 29 de octubre de 2014

taller Erotismo para mujeres

Lo presento en Luz de Paz, en pleno centro de Barcelona, en una agradable sala en un piso del Eixample. Será el viernes 7 de noviembre a las 19.30 horas, y precio simbólico de 5 euros.

Una sesión que ofrezco para que me conozcáis y haceros llegar mi enfoque del erotismo. Quiero compartir con vosotras desde mi experiencia como mujer, desde mi formación como psicóloga y mi especialización en la es.te.r.

Será un rato para conocernos, ofreceremos el ambiente necesario para ir cada una conectando con su cuerpo y su vitalidad, cada una a su ritmo, encontrando el placer de ser una misma y dejando salir a la niña juguetona cuando sea el caso, o a la lanzada, a la princesa, a la coqueta, la perezosa... Somos tantas mujeres en una!.

Centro Luz de Paz, c /Provenza num.245 1o2a


Para mas información mi tel 666 80 63 84 o encarleiva@gmail.com

martes, 28 de octubre de 2014

erotismo en las mujeres

Erotismo en las mujeres

Me interesé desde siempre diría yo, por el cuerpo y sus manifestaciones. Me ha gustado toda la vida asomarme a las diferentes disciplinas que se me ofrecían desde el movimiento. El baile sobre todo me ha gustado practicarlo siempre, y también el teatro, la expresión corporal.

He participado en talleres como clienta y he propuesto los míos propios a partir de la inspiración que me venía de ellos, y de la vida misma. Desde bebés hasta mayores, la máxima, el objetivo: acompañar a expresar, ayudar a ir sacando eso que hay dentro y que tenemos tan controlado...

Una señora salió de la sesión que habíamos hecho, que ella llamaba gimnasia, diciendo "el cuerpo se pone contento". Me gustó la expresión. El cuerpo, sí, ese al que apenas hacemos caso, ese a nuestro servicio, ese al que tantas veces acallamos para llevar nuestros ritmos frenéticos. Se ponía contento.

He visto como entrando desde fuera, con pequeñas consignas, la mente empieza a perezosear y deja paso a sensaciones, estados de ánimo, emociones varias. He visto como la rigidez y mecanicismo el movimiento daba paso a una mayor flexibilidad, y leso se traducía en belleza.

Y he visto siempre, siempre, aflorar la vida, lo erótico. Con más o menos dificultades, ha salido la sensualidad y el goce de vivir. Un erotismo real, natural, no de pote ni de foto de revista. Y eso ha sido en el bostezo, en el tocarse la piel, en el rodar lentamente por el suelo... Encontrando el placer de moverse, dejándose ocupar por ese aire que va entrando en cada inhalación.

Ahora ya quiero llamarlos así, " talleres de erotismo", y los ofrezco desde el placer, emocionada imaginando las transformaciones que ya he visto, y las que van a poder ser. Con los recursos que he ido integrando a lo largo de mi vida y que quiero compartir, sabiendo que llevamos algo dentro que pulsa y que puede y debe salir. Para una vida más plena, consciente y placentera.


viernes, 3 de octubre de 2014

construcción a partir de la psicomotricidad libre

construcciones...

Desarrolló muy pronto el gusto por los materiales de todo tipo que se encontraba en el pequeño jardín o en sus paseos por la naturaleza: piedras de distintos tamaños, un cartón, un palo... Los tocaba, les daba forma, los alineaba, los amontonaba... No tenía ni tres años y pasaba horas haciendo caminos en la tierra, comprobando sus formas, sus expresiones: la arena de la playa, la tierra blanda tras la lluvia, la sequedad del terreno falto de humedad... Las manos tocaban acariciaban, profundizaban y daban forma.





Se desplazaba, ágil, de un lado a otro, agachado, mirando, observando desde distintos ángulos, excavando pequeños túneles por los que pasaban sus coches o camiones...El "jardín" de los abuelos ya no se podía llamar así, parecía una zona de experimentación. ¡Era una zona de experimentación!. Como era el salón de su casa también, más adelante, cuando trasladó su gusto por las construcciones al interior, y quiso crear ciudades enteras que cabían en la sala de estar. Caminaba su familia con cuidado, como gigantes en un minúsculo reino de pueblos con vías de tren, casas, árboles, montañas...

Los suyos, sus mayores, sonreían encantados, contagiados del entusiasmo. Se cuidaron mucho de no frenar el ímpetu constructor del pequeño y pusieron mínimos límites, ajustándose al máximo a la necesidad que veían en él.

"No estamos en el campo, vale, tenemos estos espacios, vale, y... ¿entonces?. Pues eso, ¿qué más da si en ésta época no podemos tener las flores en el terreno?, ¿qué más da si vienen visitas y la sala está ocupada por la mini ciudad cambiante?. Fue así.

Y creció. Creció con una capacidad de situarse en el espacio sorprendente, y esa habilidad la trasladó a la abstracción cuando por evolución su cognición estuvo preparada. Y plasmó en dibujos aquello que había estado viviendo en su cuerpo, experimentando con todos sus sentidos, entregado




. Y lo plasmó, claro, en los problemas de mates, de física, de dibujo técnico... Era un juego para él, seguía disfrutando y hacía disfrutar a sus profesores.

Terminó bachillerato con matrícula de honor. Está estudiando arquitectura. Aún recuerda sus construcciones.